Los grandes premios de la "chica" Villanueva del Rey

 

Desde hace cuatro años, en Villanueva del Rey (Córdoba) se convocan dos tipos de premios de tipo cultural, entre otros muchos de larga tradición y muy reconocidos por los habitantes de esa localidad. 

Esos dos certámenes culturales son los Premios Rosablanca y el Premio Café Español (relato corto). Aparte de la colaboración que “los Rosablanca” podamos haber prestado a la existencia de esos premios, nada hubiera sido posible sin el interés municipal, y conviene decirlo porque detrás de los premios hay mucho trabajo pero sería en vano si no hay alguien que empuja y justifica el esfuerzo.

Siendo los dos tipos de Premios culturales, el proceso de cada uno de ellos es tan diferente que merece la pena recordarlos, porque el tiempo corre y luego nada queda escrito.

 



Retrato sobre cómo crecer

Los Premios Rosablanca de Fotografía comenzaron siendo un galardón unido a las fiestas de Villanueva. 50 euros fue el premio y solo alguna y algún valiente decidieron participar. Y sin embargo, ese pequeño Premio Rosablanca de cuando ni nos conocíamos muchos de nosotros y el apodo casi no se usaba, surgió el que ya cumple siete años en 2021 y se ha convertido en el premio de fotografía más importante de Andalucía si tenemos en cuenta el total de fotografías participantes y su calidad a nivel internacional en los dos años anteriores al año Covid-19, el pasado 2020.

En esta ocasión, el Premio Rosablanca de Fotografía ha conseguido la mayoría de edad y la puesta de largo con el reconocimiento que han hecho de su convocatoria, bases y organización la Federación Andaluza de Fotografía y la Confederación Española de Fotografía, organismos que asocian a la gran mayoría de los aficionados y profesionales de este arte.

Como decía, los Premios Rosablanca han crecido de lo chico a lo grande, de lo particular a lo común. Y ahora ya el Ayuntamiento los alienta institucional y económicamente junto a Rosablanca, que también organiza y produce.



Razones para revivir a Lorca

La Semana Cultural de Villanueva del Rey fue el marco de un nuevo acto organizado por Rosablanca, como en años anteriores. En este caso estuvo dedicado a la figura de Federico García Lorca, que supera su propia grandeza: la de su muerte, la humana y la cultural.


Cualquiera de estas tres miradas sobre Lorca son siempre profundas pero parciales. El permanente recuerdo de su asesinato y desconocido lugar donde esta enterrado; su destacada personalidad en el mundo cultural de la época y la importancia de su propia obra no dan ocasión de efectuar un viaje abierto de lo que Lorca ha representado desde su nacimiento hasta su muerte y la España que, de haber sobrevivido, hubiese contribuido a crear en lo social y lo literario, porque nunca se podría olvidar su influencia en la cultura, su impulso en el caminar político de España.


¿Si Lorca no hubiese muerto España hubiera sido a distinta? ¿Su obra y su país hubieran evolucionado hacia un escenario imaginable de mayor progreso, libertad y conciencia social?


La España de 2019 no ofrece datos muy alentadores sobre cuánto avanzó el país hacia esos objetivos básicos de libertad e igualdad que se defendían antes del alzamiento militar de 1936 contra el gobierno constitucional. Lorca dejó abiertas las ventanas de la literatura, relatos, teatro, poesía, música, activismo cultural en definitiva para que el paí hubiera seguido esa evolución. Lorca fue y es música, recuperó una parte de nuestro folklore tradicional para impulsar una identidad de país democrático y culto; su persona sigue unida hoy multitud de movimientos e iniciativas culturales


Perdimos su persona, pero no su aliento. Y perdimos mucho más que tiempo.


No hay que esforzarse mucho para adivinar a un Federico García Lorca de hoy, vivo. Por el contrario, es suficiente con defender ese futuro que no fue, recuperar lo perdido y que nada ni nadie pueda impedir un futuro que no es negociable: nuestra vida con Lorca bien vivo.


CONTENIDO DEL ACTO


La España en que Lorca nació, su vida e inquietudes y, sobre todo, su aportación creativa e intelectual dio a este acto que programamos para la Semana Cultural de 2019. En él se abordó la historia de la España de Lorca en un continuo de estos 121 años que se cumplían desde su nacimiento; se escuchan sus poemas y textos dramáticos, suena su música recuperada del olvido para la sociedad de su propia mano y los autores que crearon canciones con sus poemas traídos a través de la voz de una experimentada cantante/cantaora de dulce y exquisita voz: Balbina López Caballero


Fueron tres Lorca diferentes: intelectual, músico y escritor. Y un cuarto Federico García que la imaginación del cine llevó a las pantallas con esplendor y una luz prodigiosa.


PROGRAMA

• Proyección del vídeoclip “No me encontraron”. (Miguel Poveda)

1. Presentación del acto: “El día en que nació”

2. Canciones para Federico, por Balbina López Caballero
- Sevillanas (FGL)
- El vals (Leonard Cohen)
- Café de Chinitas (Popular)
- Muerto de amor (A. Prada)
- Anda jaleo (FGL)

3. Un poema para Federico: - Elegía primera”, de Miguel Hernández y “Cante hondo” (Dos poemas)

4. Presentación y proyección de la película “La luz prodigiosa”
FICHA:
"LA LUZ PRODIGIOSA"

Dirección: Miguel Hermoso.
Guión: Fernando Marías.
Intérpretes: Alfredo Landa, Nino Manfredi, Kiti Manver, José Luis Gómez.
Fotografía: Carlos Suárez.
Música: Ennio Morricone.
Canta: Dulce Pontes
Género: drama.
España, 2002.
Duración: 105 minutos