José F. Gálvez (AFOCO), Premio Nacional de Fotografía presidirá el Jurado del Premio Rosablanca de Fotografía /21
“LA GRAN MAYORÍA DE LOS FOTÓGRAFOS CONCURSAN POR PRESTIGIO”
- “El aval de la Confederación Española de Fotografía (CEF) es un plus de confianza al Premio Rosablanca”.
- “Ser miembro de un Jurado exige cultura del medio, honestidad e intuición para descubrir futuros valores”.
Hace quince años (2006) a José F. Gálvez (Córdoba) le concedieron el Premio Nacional de Fotografía sus compañeros, los fotógrafos asociados en toda España a través de la Confederación Española de Fotografía. Aún hoy, cuando reclaman la creación de un Centro Nacional de Fotografía, los más destacados siguen llamándolo “premio” con minúscula humilde aunque sea un gran reconocimiento que califican de “Nacional” porque ya es vieja esa reclamación: el reconocimiento plural de este arte.
A José F. Gálvez, tantos años presidente de la Asociación Fotográfica de Córdoba (AFOCO), le premiaron sobre todo por aquella mirada de “Nino”, su hijo, entre los barrotes de una escalera madrileña. Supo capturar el instante, lo que le transmitían, porque también él tiene la sensibilidad y la sabiduría para contener en un disparo de cámara un universo de experiencia cuando sienta enfrente suyo a los amigos que le visitan en el cordobés y centenario Círculo de la Amistad.
EL MENTOR DEL ROSABLANCA
En los últimos cinco años (incluyamos el año que no fue, el pasado) ha ejercido como presidente del Jurado del Premio Rosablanca de Fotografía, tal vez porque a los grandes se les convierten en retos los desafíos pequeños. Pepe Gálvez es el mentor y el pulso de este Premio que ha aprovechado el silencio de 2020 para crecer y abordar esta nueva edición con una talla impensable en 2015, cuando el trofeo era un libro de Fotografía y 100 euros generosos para una niña de 15 años.
- Acaba de cerrar la XVII Bienal de Fotografía de Córdoba, un acontecimiento de calibre internacional pero ya lleva dos meses con el Premio Rosablanca tirándole de las costuras. ¿Volverá a ser presidente del Jurado este año de la “normalidad”?
- Ojalá fuese la verdadera normalidad, la que tuvimos u otra nueva. Y sí, he aceptado presidir de nuevo el Jurado de este Premio.
- Después de los años anteriores éste será coser y cantar.
- Al contrario. Hasta 2019 el Premio Rosablanca fue casi milagroso. Con una dotación económica de solo 300 euros participaron fotógrafos de talla internacional y el nivel general fue de una calidad inesperada. Algo no iba bien. Aquello podía ser flor de un día. En 2019 ya nos planteamos que, si el Premio quería seguir contando con atractivo, calidad y una participación aceptable, era imprescindible incrementar la dotación económica. Estábamos repartiendo una cantidad muy pequeña entre dos premios diferentes, el Rosablanca y el Trofeo Fotográfico Villanueva del Rey, que destacaba aspectos locales. La organización debía decidir cuál era el objetivo, que estaba claro en lo cultural, y la estrategia de acuerdo con los medios de que se disponen.
- ¿El premio económico es decisivo?
- En absoluto. Salvo en premios muy importantes económicamente, la gran mayoría de los aficionados y profesionales que concursan lo hacen por prestigio. Es cierto que ya no hay que imprimir grandes fotografías para concursar, casi todo se hace y se envía a través de internet, pero los costes del material han sido siempre muy importantes y cada día lo son más.
- ¿Tan caros?
- No pensemos en las cámaras analógicas de cuando éramos adolescentes. También está el coste de los viajes, tan habituales para buscar lugares, imágenes que hay que encontrar, no están siempre en la esquina de al lado. Y ese coste sale de los bolsillos particulares; luego se procura recuperar una parte compitiendo en concursos.
- ¿Los ochocientos euros del Premio Rosablanca es una cantidad razonable?
- Los cambios en las Bases del Premio son muy importantes y la cantidad económica es la de un premio medio, solo medio, pero importante para poder estar presente entre la maraña de premios que existe. Para poder competir en un deporte necesitas unas buenas botas, aunque la tribuna del campo no sea de lujo. Luego vendrá la calidad de lo que haces, el conocimiento público de lo que consigues. Eso también es cuantificable. Y no es necesario hablar de los jurados: en un concurso de fotografía es decisiva la imagen que se tenga de su labor.
LA CREDIBILIDAD DEL JURADO
- ¿Tan importantes son?
- Hay escuelas que enseñan a ser Jurado, a enjuiciar el trabajo de los demás con conocimiento, no solo con buen ojo o buen gusto estético. A veces no vale ser técnica o estéticamente un buen fotógrafo. Ser miembro de un Jurado exige cultura del medio, honestidad y ese toque de intuición para descubrir a quien, en un futuro no muy lejano, puede ser un reconocido autor o autora.
- ¿Está satisfecho con los Jurados que ha tenido el Premio Rosablanca hasta ahora?
- La credibilidad del Jurado es determinante para un Premio de Fotografía, como para cualquier otro arte. En el Jurado del Rosablanca han participado fotógrafos de una calidad superior y un respeto absoluto. Particularmente estoy muy orgulloso de debatir con ellos, además de que algunos sean amigos personales desde hace muchos años. Hemos disparado juntos muchas veces al mismo objetivo.
UN PREMIO DE CUMPLEAÑOS
- La Confederación Española de Fotografía y la Federación Andaluza han avalado las Bases del Premio Rosablanca. ¿Es importante esa decisión?
- Para los fotógrafos es importante, es un seguro ante cualquier problema sobre sus derechos como autores y la comunicación pública de sus obras. Para la organización del Premio era un objetivo desde antes de la pandemia, que lo ha retrasado todo, aunque en los últimos años Rosablanca y el Ayuntamiento fueron adaptando esas bases a la dimensión del concurso y a los estándares del sector. El reconocimiento de la FAF y la CEF es para los organizadores del Premio un mayor grado de responsabilidad y una apuesta para estar entre los que generan confianza a los fotógrafos. Tampoco nunca había existido ningún problema; este aval de la CEF y la FAF es un plus a la mayoría de edad del Premio.
17ª edición de la Bienal de Fotografía de Córdoba